América es proveedora de una gran cantidad de especies, sobre todo de animales (mamíferos, reptiles, aves o peces) en calidad de ornato o para elaborar diversos productos, así como para el mercado de mascotas exóticas. El tráfico ilegal de animales y sus pieles, así como de productos derivados, ocupa el segundo lugar como delito más redituable en el mundo, esto ha provocado que ciertas especies animales se encuentren en vías de extinción.
Jaguar: El jaguar es el felino de mayor tamaño que puede encontrarse en América; los machos adultos pesan hasta 150 kg. y miden 180 cm. de longitud más 70 cm. de la longitud de la cola. Su cuerpo es robusto y su pelaje corto y generalmente presenta un color amarillo ocre, cubierto de grandes manchas negras, que en el lomo y los costados se agrupan formando rosetas con una mancha negra en el centro; el pecho y garganta son blancos y también están manchados. Aunque son muy raros, existen también jaguares negros.
Manatí: El manatí es un mamífero enteramente acuático de gran tamaño, cuya anatomía está completamente adaptada a la vida en el agua. Su cuerpo es alargado, robusto y cilíndrico. Sus patas traseras se han transformado en una gran cola redonda, ancha y aplanada a manera de remo. En lugar de las patas anteriores, está provisto de dos aletas largas y redondeadas.
Perrito de las praderas: El perrito de las praderas es un roedor parecido a una ardilla de tierra grande, de hábitos excavadores y coloniales. Llegan a pesar hasta 1.5 kg. Sus patas son cortas, con garras largas para excavar. Su cabeza es redonda con orejas pequeñas y redondeadas. Su cola es corta, con una característica mancha negra en la punta.
Quetzal: La palabra “quetzal” proviene del náhuatl quetzalli, que puede traducirse como “cola larga de plumas brillantes” o bien “cola cubierta del quetzal”. Esta ave tiene un papel importante en la mitología prehispánica y moderna de la región. Los reyes y sumos sacerdotes ancianos llevaban tocados de plumas de quetzal. En varios idiomas mesoamericanos, la voz por quetzal puede significar también precioso, sagrado o erigido.
Tapir: Es el único representante vivo de la familia de los tapiridae del género Tapirus y también considerado familiar lejano del caballo y del rinoceronte. El tapir es de tamaño mediano-grande, aproximadamente de 2 metros de largo y llega a pesar de entre 150 y 300 kilos. Una de las características principales del tapir es su largo hocico "tubular" con el que arranca raíces, hojas, agua, hierbas y plantas acuáticas de los pantanos donde pasa la mayor parte del tiempo.
Flamingo: Los flamingos son las aves que tienen las patas y cuellos más grandes que otras. En época de reproducción solo llegan a poner de 1 a 2 huevos y ambos padres se toman turnos incubándolo de 30 a 32 días. El flamingo rosa mexicano pertenece a la familia Phoenicopteridae y es una de las especies de aves que conforman la variada fauna característica de la Península de Yucatán: siendo la única zona del país en donde se encuentran. A lo largo de más de veinte años se ha seguido su población para estudiar su biología básica, para conocer sus hábitos alimenticios, reproductivos y su problemática.
Halcón peregrino: El halcón peregrino es el más veloz de todos; llega a alcanzar hasta 180 km/h en picada. Es el halcón más elogiado y preferido por los cetreros por sus características para la caza y vuelo; de hecho, la mayoría de sus presas no son animales de tierra, generalmente son aves pequeñas que desde a mucho mayor altura las ataca a una velocidad sorprendente y el mismo golpe aturde a la víctima o muchas veces es suficiente para matarla.
Tortuga de Mapimí: Es la más grande de las cuatro especies Norteamericanas de tortugas que existen actualmente, ya que su caparazón puede llegar a medir cerca de 50 cm. La característica principal de este animal es que es endémico, es decir que no se da en otra parte por las características que requiere para su desarrollo.